Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain

miércoles, 4 de febrero de 2015

Buscando a Alaska, John Green | Reseña

O... ¿por qué carajos se me ocurrió que otro libro de John Green podía ser bueno?

Advertencia para mentes sensibles: Este libro NO (subrayo, no) me gustó. Si a ti sí, te invito a que huyas lo más lejos posible. No te voy a criticar porque te guste, no pienso que seas menos inteligente, sólo pienso que no disfrutamos de las mismas cosas. Fin. 

Sinopsis: Miles, un joven que busca su destino, y Alaska, una chica perdida en el laberinto de la vida, se enfrentan a preguntas intemporales.Antes: Miles ve cómo su vida transcurre sin emoción alguna. Su obsesión con memorizar las últimas palabras de personajes ilustres lo lleva a querer encontrar su Gran Quizá (como dijo François Rabelais justo antes de morir). Decide mudarse a Culver Creek, un internado fuera de lo común, donde disfrutará por primera vez de la libertad y conocerá a Alaska Young. La preciosa, descarada, fascinante y autodestructiva Alaska arrastrará a Miles a su mundo, lo empujará hacia el Gran Quizá y le robará el corazón... Después: Nada volverá a ser lo mismo.

Yo tengo un problema grave con John Green. No es que el tipo escriba mal, no, sabe hilar frases y las sabe hilar bastante bien. No es que me caiga mal, no, hasta eso sus vlogs son interesantes, dice cosas bastante buenas y conincido con el 90% de sus opiniones. No... el problema que tengo con John Green, es ¡sus malditos diálogos!

Ya ni hablar de sus personajes con crisis existenciales que no piensan en otra cosa todo el tiempo (lo cual por fuerza los vuelve aburridos), no. Los diálogos. Podría soportar personajes tan insufribles como Alaska, o peor, Miles, si sus diálogos me resultaran creíbles y naturales. Este fue el libro que, después de llevarme un chasco, decidí leer porque me lo recomendaron y con una crisis optimismta me dije que no todo lo que escribiera Green podía ser como Bajo la misma estrella

Valoro mucho la naturalidad de los diálogos. No quiero ver a ancianos hablando en la boca de adolescentes. No me pega. Ni yo hablo así. Y eso es todo lo que me parecen todos los personajes del libro: ancianos (amargados, además) hablando en la boca de adolescentes.

Puedo entender el drama. Los adolescentes tienden... tendemos si es que yo lo sigo siendo, a dramatizar más de la cuenta y a ver en un mar donde hay un charco, pero si algo me quedó claro en todo el libro es que Alaska necesita ayuda psicológica. Urgente. Grave. O eso me pareció a mí, habría que preguntarle a un psicólogo de verdad.

En fin, creo que yo, gracias a la inquina que le agarré a todos los personajes por igual fui incapaz de disfrutar la trama, que, digámoslo, tampoco era muy complicada y hubiera estado bastante bien narrada de una manera quizá un poco menos rebuscada. Era algo así como un drama enorme con algunos momentos de felicidad efímeros que hasta Miles manchaba con su nostalgia. De verdad, de verdad, juro que no vuelvo a tocar un libro de John Green en un buen rato, porque no quiero torturarme gratuitamente.

¡Naturalidad en los putos diálogos! ¡No pido mucho! ¡No quiero adolescentes con pensamientos de ancianos!

lunes, 2 de febrero de 2015

Romántica Juvenil: El romance que nos está vendiendo

Adendum a 2020: se le hicieron ligeros cambios a concepto en este artículo. Quizá la opinión de la autora (aka yo) ha cambiando en los detalles y para eso sería mejor dirigirse a entradas más nuevas.

Un día me di cuenta de que ya no disfrutaba de la Literatura Juvenil actual. Fue allí que, para evitar hacer corajes, simplemente dejé de leer mucha juvenil. Lo pueden ver no sólo en las reseñas sino en mi Goodreads. Desde hace tiempo me siento en un mundo donde leo los libros que en ninguna parte de la blogósfera interesan, así que me puse a analizar qué demonios me molestaba tanto de la literatura juvenil. La respuesta me cayó después de ver unas cuantas reseñas de libros que calificaban a sus protagonistas como mujeres fuertes y con carácter que yo sólo calificaba como personajes flojos, desesperados, poco creíbles y pésimos ejemplos para las jóvenes que van a leer esos libros. (Véase... El club de los corazones solitarios).

El problema de los libros no es que un personaje se pueda definir sobre si tiene pareja o no la tiene. Un personaje puede ser creíble aun siendo una chica que busca desesperadamente novio, incluso que llega a desvalorizarse por conseguir la atención de un chico, pero en ningún caso debe de ser expuesta como un buen ejemplo. Con el el libro mencionado arriba me pasó, simplemente, que me molestaba que la protagonista empezara a definir dos tipos de chicas: desesperadas por conseguir novio, pero valiosas, y aquellas chicas que tenían novio y abandonaban a todas sus amigas. 

Hace unos días encontré una reseña de After #2 (de Libros and Stuff, ¡publicidad gratis!) donde la protagonista se contradecía cada dos segundos. Primero, diciendo que no estaba dispuesta arreglarle los problemas a su novio controlador y a las diez páginas lo estaba besando... A todas luces, sin ni siquiera leer me pareció una relación enfermiza, ¿por qué se está vendiendo eso como algo bueno? ¿POR QUÉ?

No estoy en contra de que se pinten relaciones enfermizas, de controladores, de mujeres y hombres abusados (porque sí, ellos también son abusados), siempre y cuando el subtexto no diga que son ideales románticos. Yo misma tengo un par en mi fanfiction, sobre todo en Vendetta, dónde una chica se aprovecha de su novio y lo utiliza vilmente y un hombre se obsesiona de manera enfermiza con una chica menor y me sorprendía encontrarme comentarios de una chica que decía que el obsesivo era tierno... Me daban ganas de gritarle: ¡¿Tierno donde, carajo, si a punto estuvo de violarla?! 

Podemos irnos al ejemplo de siempre y toda la vida, Crepúsculo. Yo no estoy en contra de que Bella se sienta más segura con un hombre a su lado, estoy en contra de que se pinte una relación controladora (por que sí, lo es, sólo de pensar en como Edward manipula a Bella o le prohíbe ir a ver a Jacob porque se le hinchan sus putos huevos, a pesar de que ha quedado demostrado que Jacob no es peligroso) como algo bueno, algo romántico y algo tierno. 

No. Y no sólo es Crepúsculo. La alargada sombra de Crepúsculo está en muchos libros que yo ya no leeré. No quiero hacer corajes con eso y pensar que lo leerán chicas más jóvenes que yo. Una mujer fuerte, un personaje fuerte, no es aquella que intenta arreglar los problemas psicológicos de su pareja, sino que es lo suficientemente valiente como para reconocer que lo mejor es alejarse. 

Por el momento, yo no puedo hacer nada, más que escribir esto, y seguir escribiendo de mis personajes femeninos, en mis historias. Personajes fuertes aun si desean ser detectives como amas de casa, como si son putas o vírgenes, asesinas o policías. Aun si son inseguras que desean un novio o que desean el amor, todos (hombres y mujeres) hemos deseado eso y no nos volvemos más débiles por hacerlo; podemos pintar a una chica insegura que se define en base a su vida amorosa, es válido, pero no podemos atrevernos a decir que está bien que se desvalorice frente a un chico, no podemos atrevernos a definirla nosotros en base a si es soltera o no.

Poniendo un ejemplo, se suele despreciar a Sansa Stark y a adorar a Arya Stark. Una desea un príncipe, es una doncella, sueña con casarse, con tener hijos, con ser una princesa, eso no la hace débil y creo que a lo largo de cinco libros y cuatro temporadas hemos podido verlo. Arya, por su parte, es de armas tomar, pero no por eso es de piedra. Es vulnerable, y lo hemos visto. Pero son personajes como esos los que quiero encontrarme en la literatura juvenil. Personajes como Clara del Valle, como Úrsula Iguarán, como la Vieja Kush y Wilkilén, personajes como Hermione Granger o Minerva McGonagall o Molly Weasley, personajes como Maya Vidal. 

No quiero que me vendan romances con el chico malo donde la chica le arregla los problemas psicológicos y lo hace cambiar. Quiero romances realistas. Personajes realistas... Yo diría que no pido mucho, pero al ver el catálogo de juveniles, las reseñas, las sinopsis, pienso que lo que estoy pidiendo es un milagro. 

Ojalá algo me demuestre lo contrario.

sábado, 31 de enero de 2015

Recuento de los daños | Enero 2015

Las lecturas de este mes no estuvieron tan mal. Son tantas más gracias a mi rapidez que a que me haya propuesto leer tanto, porque los primeros días de enero no toqué ni medio libro. Vamos, ni el kindle agarre, que estaba completamente descargado. Leí en total 10 libros y acabé lo que me faltaba de un tomo de maga. Lo había dejado antes de llegar a la cuarta parte porque me aburría, pero me harté de verlo en el currently-reading de Goodreads por siempre y hoy me puse a terminarlo. Así que, aquí va el recuento: 

El club Dumas, de Arturo Pérez-Reverte


Libro de misterio, con acción inspirada en los folletines de Alejandro Dumas, más concretamente en Los Tres Mosqueteros (que por cierto spoilea sin ton ni son todo el libro, una suerte que ya al menos me había leído la versión abreviada hace mucho tiempo porque si no me habría quitado todas las ganas de leer Los Tres Mosqueretos). La reseña creo que es la primera que saldrá en el blog la semana que viene o la que viene, pero lo que puedo adelantar es que si gustan de los misterios en los que libros viejos van incluidos, les recomiendo el libro, y mucho. Seguro les gustará, porque, aunque cojea un poco de algunas partes, es bien sabido que todo misterio que tenga que ver con libros no puede ser tan malo. Aunque, he de decir, mi misterio preferido no fue el del Club Dumas, sino el de las Nueve Puertas (hay una adaptación cinematográfica bastante mala con Johnny Deep, por si les interesa ver de que se trata antes).

Hisho que te nazca, de Rosa Nissán


Una edición más nueva que la mía
Encontrar este libro me llevó más o menos tres ferias del libro, dos Ghandis y dos sótanos y al final fue a aparecer en la librería de viejo que está casi en la esquina de la calle Rosales. Debería de haber ido allí primero. Este libro es la continuación de Novia que te vea, la historia de la judía sefardí Oshinica que leí hace mucho mucho, pero mucho tiempo. No me gustó tanto como el primero, porque Novia que te vea habla de las esperanzas de la vida, del amor, de las ganas de estudiar, de rebelarte y de hacer muchas cosas e Hisho que te nazca habla de los catorrazos, de como el felices para siempre, definitivamente no existe porque muchas cosas cambian con los años, las desilusiones y los deseos incumplidos. Aún así, es una buena historia, mucho más madura que la primera, pero también más triste. No cabe duda de que lo recomiendo, pero eso sí... sólo para los interesados en el tema.

Los novios búlgaros, de Eduardo Mendicutti


Confieso que al principio, el libro no me convencía casi nada,. Pasó como cincuenta páginas sin convencerme y más o menos en la cincuenta y una Kyril empezó a hacer locuras de todo tipo y a volverse mucho más carismático que al principio, que apenas si se adivinaba un caracter reservado y taciturno. La moto, la novia, la boda, todo. Kyril fue lo que valió más del libro, el recuento de las aventuras que vivía. A mí me gustó bastante el libro al final, total, con todo y ese final agridulce que tiene. Aún no he escrito la reseña sinceramente por que no sé que poner, hay personajes entrañables y personajes fácilmente olvidables, pero Kyril les gana a todos. De calle. No sé cuando haga la reseña porque es de esas que cuestan mucho tiempo y muchas energías. No sé si ponerlo por las nubes o ser realista o hablar de sus defectos o...

Los días de la sombra, de Liliana Bodoc


Había dejado descansar La saga de los Confines, pero al final no me resistí y abrí este libro. Una novela de fantasía épica inspirada en culturas mesoamericanas y no en un mundo medieval es algo que nunca en mi vida había visto y me sorprendió tanto, que no podía parar de leer, además de que la prosa poética de la autora me hacía navegar más fácilmente por sus páginas. Este libro sí que tiene reseña ya escrita, pero un tardará algo en salir, pues escribí una reseña bastante larga de toda la saga. De principio, yo la recomiendo mucho, aunque eso sí, no apto para personas sensibles, a veces a la autora le da por ser un poco George R. R. Martin (aunque a ese tipo nadie, absolutamente nadie, le gana) y no tiene mucha piedad. Mueren inocentes y no inocentes y para colmo de males te puedes llegar a enamorar hasta de los traidores, porque todos tienen sus motivos... Menos los malos malísimos. Esos tienen motivos, pero es imposible enamorarte de semejantes motivos para ser como son.


La delicadeza, de David Foenkinos


Una novela romántica del tipo que no disfrutaba hacia mucho. Un romance que me sonó absolutamente real, precioso, tierno en su normalidad. No es una historia de amor imposible, o épico, pero es por ello más fantástica que nada, porque uno desearía enamorarse así, de esa manera. Además, la prosa amena que tiene ayuda a que mueras de ternura y a la vez te identifiques con los personajes. A mí me gustó mucho y según recuerdo, le di sus cinco merecidas estrellas en Goodreads, cosa que no pasa nada seguido con los libros que leo. Ya escribí la reseña (fue de las primeras que escribí) y como adelanto, les digo que estará disponible el 14 de Febrero y que si esto no los convenció de leer el libro, seguramente esa reseña sí que lo hará.


Los días del fuego, de Liliana Bodoc


Es la tercera (y última) parte de La saga de los confines. Me gustó muchísimo a pesar de que una parte de su linea temporal cojea un poco y parece meter cosas sin importancia de repente... (al final la tienen, claro, pero llega un momento en que no lo entiendes del todo); eso sí, hay muchas cosas que parece que se quedaron en el tintero de la autora y para eso habría hecho falta un libro como de mil páginas más o menos. Aun así, me gustó mucho y mete a toda la saga en los libros que releería, definitivamente. Ya escribí la reseña de toda la saga en general, así que si aun no los he convencido con mis palabras bonitas, pueden esperarla y leerla para convencerse de por qué todo el mundo debería leer esta saga. Simplemente porque es fantasía épica como nunca antes la había visto.

El Proceso, de Franz Kafka


Lo leí para el Club de lectura del foro de fanfiction.net La noble y ancestral casa de los Black. Lo primero que mi señor padre hizo al verme leerlo fue decirme que, si Kafka fuera mexicano, este sería un libro costumbrista y tenía mucha razón: la pesadilla burocrática que el libro plantea es muy... México; es como si me estuvieran retratando una oficina gubernamental, la verdad es que esta historia y la realidad no difieren en demasiadas cosas. La historia es divertida, aunque caótica y muy Kafkiana. El libro fue publicado después de la muerte de Kafka y no cabe duda de que no tiene desperdicio; yo le diría a todo el mundo que le diera una oportunidad, aunque he visto mucha gente a la que no le acaba de convencer, pero bueno. Ahí lo tienen: denle una oportunidad. 

La conquista de América: la pregunta del otro, de Tzvetan Todorov


Me le recomendó una amiga que había tomado un curso... creo que de Literatura prehispánica o algo parecido cuando le pregunté por buenos libros que hablaran de la conquista (específicamente de la Consquista de México). Obviamente, este es un libro que no recomiendo tan a la ligera, pues... es historia. No tiene un nudo, no tiene sorpresas y en general, no tiene misterio alguno porque es la historia que ya casi todo el mundo conoce o de la que ha oído hablar. Sólo es un compendio de lo que ocurrió en la Conquista, sobre todo centrándose en México, con las opiniones de Todorov intercaladas y sus valoraciones sobre las estrategias entre un bando y otro. Si les gusta la historia, pues léanlo... si creen que se van a quedar dormidos, manténganse alejados, porque ese es el mejor consejo que puedo darles.

Holocausto, de Robert Marasco


Libro de terror malo. Malísimo. Pésimo. Si pudiera lo quemaba, más o menos. Me llevé una terrible decepción con el libro porque mi madre me lo había recomendado mucho, diciendo que, aunque no era exactamente una obra de arte, daba mucho miedo y que a ella la había asustado mucho. De miedo nada. Stephen King me da más miedo y nunca he considerado que ese hombre dé mucho miedo, It me dejó dormir tranquilamente todas las noches. Es ese tipo de libros que merecen no existir y, gracias a Dios lo compré usado porque nuevo me hubiera dado un poco de más rabia con el dinero gastado. No. No lo lean. Jamás. Incluso para ser una novelita comercial best-seller es malo. O sea, ya se imaginarán en que categoría lo pongo: en la de los libros que son escoria.

La otra orilla del abismo, de Sofía Olguín


Es lo más nuevo de Editorial Bajo el Arcoirís, que se dedica a publicar libros LGTBI para niños y ahora incursiona en la juvenil adulta para mostrar algo de visibilidad LGTBI en la literatura, que ya se sabe que los personajes con distintas orientaciones sexuales son pocos y en español, son aún menos. El libro estará disponible en descarga directa este 14 de Febrero, por si a alguien le interesa. Yo me comprometí a reseñarlo, algo que justamente estoy haciendo ahora. No les quiero adelantar gran cosa, porque la verdad es que si me dejan les contaría todo el argumento y lo bueno que es, pero de momento les puedo decir que si les gustan las historias de conspiraciones, demonios y demás criaturas de la noche, se los recomiendo ampliamente.

Vampire Knight, Volumen 6


¿Qué les puedo decir? Lo abandoné en el segundo o tercer capítulo del tomo debido a la desesperación que me causaba una historia tan cliché. Se los resumo: triángulo amoroso, protagonista pendeja y exceso de fanservice para chicas. ¡Es desesperante. Definitivamente, no sé por qué me torturo leyéndolo... lo hago más o menos una vez cada seis meses, cuando me acuerdo que yo leía este manga. En fin... probablemente lea el volumen 7... y luego quizá el 8... y si me canso quizá lo abandone definitivamente y lea otras cosas más productivas o mangas mejores (se aceptan recomendaciones aquí debajo). 

Este fue el recuento del mes, no me fue nada mal. No leí gran cantidad de libros malos, lo cual fue perfecto... y la mayoría me gustó. Quizá fueron muchos, porque no todos los meses alcanzo semejante meta...