Divagaciones de una Poulain
by Nea Poulain

sábado, 17 de diciembre de 2011

Menú de libros (VII)


De tinta…


Primer tiempo
La elegida de la muerte de Virginia Pérez de la Puente.
Keyen la rodeo con el brazo y la obligó a apoyar la cabeza sobre su hombro. Ella se resistió un instante, pero después dejó descansar los músculos de su cuello y, sin poder evitarlo, lloró silenciosamente.
—¿Mejor? —preguntó él con voz amable un rato después. Ella asintió. Keyen bajó la mirada hacia ella y después posó suavemente los labios sobre su frente—. Cuando te pica una serpiente —dijo, sin esperar una respuesta por parte de Issi—, tienes que sacarte el veneno cuanto antes. Tú llevas años dejando que ese veneno te corra por la venas, Issi. Y eso te está matando.

Segundo tiempo
Ciudad de Ceniza, de Cassandra Clare
—Puedes cerrar los ojos y pensar en Inglaterra, si quieres —sugirió él.
—Nunca he estado en Inglaterra —repuso ella, pero bajó los párpados.
Sintió la húmeda pesadez de sus propias ropas, frías y picantes contra la piel; el empalagoso aire dulce de la cueva, más frío aún, y el peso de las manos de Jace sobre los hombros, lo único que resultaba cálido. Y entonces él la besó.

Tercer tiempo
El Alquimista, de Michael Scott
—Soy mayor, muy mayor —respondió Flamel con voz tranquila y calmada—. ¿Sabes a cuántos amigos he enterrado a lo largo de los siglos?
—¿Y sentiste su pérdida? —preguntó Hécate. En su voz se percibía una nota genuina de curiosidad.
—La de cada uno de ellos.
—¿Todavía la sientes?
—Así es, cada día que pasa.
La diosa alargó la mano y la colocó sobre el hombro de Nicolas Flamel.
—Entonces aún eres humano, […]

Postre
Delirium de Lauren Oliver
[…] en ese momento recuerdo lo que contesté hace meses […] cuando me preguntaron por Romeo y Julieta, y lo único que se me ocurrió decir fue que me parecía «bello». Entonces no pude explicarlo, pero quise decir algo sobre el sacrificio.
La camiseta de Alex es roja y por un momento me parece una ilusión óptica, pero luego me doy cuenta de que esta mojada, empapada de sangre. […] Esta de pie, inmóvil y blanco, petrificado en el rayo de luz, y creo que nunca, en toda mi vida, he visto nada más bello que él.

lunes, 5 de diciembre de 2011

El premio que no olvidé


Para variar, le han concedido su tercer premio a este blog, cosa que me alegra. Eso significa que voy creciendo y que después de todos estos años manteniendo el blog… bueno, no puede ser caso perdido. A mí me gusta bastante mi blog, no sé a ustedes (?)… trato temas bastante variados :D

Bueno, pues he aquí el premio:



7 cosas sobre mí:

1. En este momento estoy estresada.
2. Amo mi cabello con rulos. Es desordenado y larguísimo, pero genial.
3. Rompí mi record: leí un libro por día hace una semana. Fueron cuatro.
4. Quiero que sea mi cumpleaños ya. Para decir que tengo dieciséis, you know.
5. Amo comer kiwi.
6. Tengo sueño. Bueno, casi siempre quiero dormir, duermo mucho.
7. Soy potterhead.

Blogs a los que paso el premio:

2. Estrella en Potencia, de Bell.
3. Yellow and Green, de Catta
4. Magia y Locura, de Sole.

Nea.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Delirium



Aunque eso de las distopías se puso de moda, quiero decir que además de Los Juegos del Hambre yo no había leído ninguna más. La mayoría no me atraían. Así que si Delirium es un calco de otra distopía, no lo sé… Quiero decir que he leído tantas reseña y críticas, buenas y malas, de este libro, que no sabía que pensar. Para colmo, no lo había visto nunca en librerías. Pero ahora que lo pude bajar como eBook, lo leí.

“Una vida sin amor es una vida sin sufrimiento: segura, medida, predecible y feliz. Por eso cuando los habitantes de esta ciudad del siglo XXII cumplen los 18 años, se someten a la intervención, que consiste en la extracción de la parte del cerebro que controla las emociones. Lena espera ese momento con impaciencia, hasta que un día se enamora...”
¿Suena a cliché, no?

Bueno, dejado del lado lo cliché quiero decir que el libro es muy muy muy muy muy muy bueno. Los personajes son tridimensionales al cien por cien, y hacen que te intereses por sus vidas.

Sin embargo, hablemos del contexto del libro: un mundo sin sentimientos, sobre todo, sin amor. Da miedo. No es tranquilizante, como Lena cree al principio, no es más sano. A mí, me da miedo. Me da pavor esa frialdad y no me puedo imaginar un mundo en el que la gente pueda vivir así. Todos dicen que después de la “operación” eres feliz, que todo es mejor. Bueno, pues discúlpenme, pero a mí no me lo parece (o será que estoy enamorada).

Ahora, hablando ya del libro en sí: es demasiado interesante. Lo narra Lena lo cual no resulta ni tedioso ni aburrido, sobre todo porque aunque reflexiona demasiado, no deja de lado lo que está pasando en ese momento. Y tampoco es un personaje excesivamente empático, ni parece saber todo lo que sucede en todo momento. Además, vas viviendo en primera persona su cambio de opinión. Al principio cree en la operación, está ansiosa por ser “curada”, pero después, poco a poco, cuando sus sentimientos por Alex la inundan, su opinión va cambiado: no se sopetón, sino poco a poco.

De los demás personajes… Alex es un amor. Tal vez demasiado empeñado en que Lena haga lo correcto, en que piense bien las cosas, o tal vez demasiado cursi algunas veces. Pero amor después de todo. Hanna me gustó mucho, es rebelde…, tiene ideas que al principio Lena no acepta y es una amiga que me gustaría tener.

Por otro lado, maldito final. ¿Cómo dejar el libro allí? ¿En un punto tan importante? Sólo sé que esperaré la continuación muy impaciente y nada más, para dejarlos exentos de spoilers.

Nea.