Empiezo a
creer que sí leo estos libros por masoquismo puro. ¿Qué hacía el domingo antes
de entrar de vacaciones de semana santa yo leyendo Despedida de Claudia Gray,
de la saga Medianoche que es una de las sagas de la progenie infinita que creo
Crepúsculo (que antes había libros pésimos, pero no tantos). Así que sí alguien
vio mi tweet de “¿Qué hago a las doce de la noche leyendo libros malos?” ese
día ya sabe que estaba leyendo.
Sinopsis: Bianca ya forma parte de
la Cruz Negra, la organización mundial de cazadores de vampiros, y bajo la
tutela de Kate y Eduardo, se entrena con disciplina militar. Ninguno de sus
compañeros conoce su verdadero origen y, en algunas ocasiones, esconder sus
poderes sobrenaturales no le resulta nada fácil. Por suerte, Bianca cuenta con
el apoyo incondicional de Lucas, aunque lo cierto es que le gustaría pasar
mucho más tiempo con él. Las cosas se complican cuando Bianca descubre que Kate
y Eduardo han capturado a Balthazar y se disponen a torturarlo para obtener
información acerca de la señora Bethany. Muy afectada por la noticia, Bianca
siente que no puede mantenerse al margen, pero sabe que ayudar a su amigo
supondría infringir todas las normas de la Cruz Negra...
En fin, ¿qué
tenemos en este tercer suplicio?
(sí, quedo claro que leo por puro masoquismo y aburrimiento, de entrada ya sé
que el libro va a ser una idiotez, así que no espero gran cosa de él y
cualquier mejora me parece extraordinaria… claro, que estos libros mejorando
son como imaginar a Perla Shumajer escribiendo con buena ortografía).
Bianca es igual
que antes. Media tonta, medio tonta… pero sale de todos los apuros posibles (y
no precisamente por ser muy inteligente…). Lucas
me saca de quicio desde el primer momento, es más, ni guapo me lo puedo
imaginar. Pero vamos a los personajes secundarios, que son lo más desesperante
en este libro.
Raquel (que en
Medianoche me pareció un relleno y en un Adicción un personaje que había
llegado a donde estaba por pura suerte) se va para atrás, involuciona todo lo
que le es posible involucionar a un personaje como ella. Dana es de relleno, pero cae mejor que Raquel. Eduardo parece un niño de cinco años cuando no esta enfrentándose a
vampiros… no, wait, parece un niño de cinco años todo el jodido rato que aparece.
Kate es… Kate. Omitiré las opiniones hasta el siguiente libro.
Tenemos a
una banda de Cazadores de vampiros (la cruz negra) que se ha terminado por
volver ridícula hasta límites insospechados. Si al principio parecía coherente,
olvídense de eso: son ridículos al 100x100. Igual que los vampiros, si a esas
vamos. Bueno, a todos los vampiros exceptuando por Balthazar que es como la sal del libro. Cloruro de Sodio (Balthazar) es lo único medianamente
interesante, y en este libro involuciona todo lo que puede involucionar. O sea,
que acepte que Charity está loca y ya. Pero nooo, el muy idiota ahí va, tras
ella. Y luego porque pasan las cosas.
En fin, para
que hablo más, el libro es ridículo. Bianca y Lucas son ridículos. Todo es
ridículo. La saga dejo de tener coherencia (¿la tuvo alguna vez?) para siempre.
Nea
PD:
A falta de entradas mejores…