Los
ilusionistas. Admito que la fui a ver porque era eso o ver The Bling Ring y
aunque ver a Emma Watson me seducía, mi madre eligió está porque la veía con
más acción. No la culpo. Pronto dejará de estar en cartelera y yo no tengo ni
idea de si me gustó o no. Así que volviendo el tiempo atrás voy a hacer un
recuento de las cosas que me gustaron y las que no, para ponerlo todo en
balance.
Lo que me gustó:
- Daniel Atlas. Más que por ser Daniel Atlas, por sus trucos de cartas al principio. He de decir que fue el que más se me quedo grabado en la mente, porque no me acuerdo del nombre de la chica pelirroja, y apenas me acuerdo de los otros dos.
- Los efectos especiales. Algunos.
- La persecución con los carros. Siempre me gustan las persecuciones, más si acaban con carros volteados. Pero no es que esta haya sido una persecución muy impresionante, hasta la de The Italian Job le gana.
Lo que no me gustó:
- Morgan Freeman dando vueltas. Morgan Freeman… bueno, siempre actua de Morgan Freeman y generalmente hace películas extraordinarias, sobre todo como Antes de partir. Aquí está el hecho de que toda la película esperé que hiciera algo y nada, simplemente una gran nada. ¿Su personaje desenmascara magos? Pues bien, los de la película le llevan ventaja siempre.
- La francesa. ¿Qué hace allí?
- El final en general. Todo lo relacionado a El ojo. El final sorprende al espectador, sí, pero resulta forzando, increíble, una declaración completa del hecho de que los personajes no están construidos y que cambian abruptamente de personalidad. Toma las salidas fáciles, finalmente.
En general,
la historia tenía una premisa arrolladora, interesante y un comienzo muy bueno.
Después desinfla. No tengo nada más que decir. No sé qué más decir.
Sinceramente, esperaba algo más que efectos y movimientos de cámara: esperaba
una historia que me mantuviera pegada a la pantalla.